UN CACHITO DE MI ❤️🩹
Hola de nuevoooo☕️
Estamos de vuelta otra semana más con otra publicación y esta semana que tenemos temática libre quería aprovechar ya que es la última de temática libre para hablar sobre mis prácticas en un hogar tutelado de menores.
Durante tres meses os puedo asegurar que no hubo ningún día igual, cada día era diferente al resto, aunque habían cosas que eran de rutina y si eran iguales pero solo el camino al piso o el camino con alguna de las chicas a alguna de las actividades que tenía no era igual.
Yo iba de lunes a viernes por las tardes de 15:30 a 10:30 aproximadamente, yo llegaba más o menos cuando estaban comiendo o terminando de comer y yo iba a nuestra sala y leía lo de esa mañana o si era lunes o festivo, desde el último día que estuve.
Luego cuando terminaban de comer, mientras ellos recogían siempre tenía una reunión con la educadora social, que es la coordinadora de ese piso, después también se incorporaba el profesional de ese turno con nosotras a la reunión. A las 16:30 empezaba la hora de estudio o deberes hasta las 18:00 aproximadamente que era la merienda, algunos días también estaba toda la tarde acompañando a los más pequeños, que son los que tiene más actividades, y al volver de las actividades que depende mucho del día, pues o se hacían deberes o tenían un rato libre y nos íbamos al parque, con las más pequeñas, ya que estas no podían estar sin la supervisión de un adulto.
Por último tocaba las duchas, preparar la mochila y merienda para el día siguiente y supervisar que hagan la cena y cenar o si alguno de los que eran más mayores tenían próximos exámenes pues se repasaba con ellos o me contaban el tema y así era los días un poco resumidos.
Os dejo unas fotos de tres meses maravillosos ya no como profesional sino como persona, yo también crecí con ellos.
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